Mini guía para hacer la compra sin riesgos para tu salud

Hacer la compra en verano puede convertirse en toda una odisea. El calor, la fatiga, la carga, calidad de los alimentos, el transporte... se pueden convertir en nuestros enemigos a la hora de hacer la compra si no sabemos cómo hacerlo para que llegue todo en buen estado, incluso nosotros desde la tienda a casa.

Por eso te ofrecemos una mini guía para que hacer la compra este verano sea más una diversión, una tarea entretenida que nos distrae de los problemas cotidianos más que un sacrificio.

1.- Elaboraremos una lista con todo lo que vayamos a necesitar. Realizaremos tres columnas separadas:

- una para los alimentos que no requieren frío

- otra para los que sí necesitan ser refrigerados

- y una última, para los congelados.

Los congelados son los que compraremos en último lugar y a la hora de guardar los productos en bolsas, la carne y el pescado no los pondremos encima de otros alimentos por si pierden jugos y nunca los alimentos los pondremos junto a los productos de limpieza.

2.- Comprobaremos el estado de los alimentos, sobretodo cuando compramos productos frescos. La carne, por ejemplo, es muy importante que no tenga pérdida de líquidos, que el envase esté intacto y no gotee. El pescado ha de tener un color brillante, escamas adheridas. Las frutas y las verduras, deben estar limpias, sin polvo ni restos de suciedad. Los congelados no deben tener escarcha y las latas no deben estar oxidadas o con golpes. Y por supuesto, todos deben tener toda la información que han de llevar.

3.- Leer las etiquetas

4.- El transporte, de la tienda a casa. Llevar la compra desde la tienda a casa debe hacerse en el menor tiempo posible, en buenas condiciones y por supuesto, sin cargarse. Es aconsejable un carro de la compra con bolsa térmica para poner los alimentos refrigerados y congelados para asegurarse de que no sufren cambios bruscos de temperatura. Si vas muy cargado/a es recomendable un carro de 4 ruedas con apoyo delantero para no tener que cargar con el peso y así también te sirve de apoyo. Tu espalda te lo agradecerá. Si no vas muy cargado, con un carro de la compra de 2 ruedas es suficiente.

Si tienes que subir escaleras, mejor hazlo con un carro de 6 ruedas que te permite subirlas sin ningún esfuerzo.

Si tienes poco espacio en casa, no te preocupes, un carro con doble plegado es ideal pues ocupa muy poco y es muy fácil de guardar.

Hay carros de la compra para todos los gustos y para todos los estilos y también para todas las necesidades, solo tienes que saber cual necesitas y elegir uno.

La misión de un carro de la compra Rolser es facilitarte tu día a día, así que hazte con el tuyo y este verano haz la compra sin cargarte.