No somos un carro para la compra cualquiera

Cualquier carro para la compra puede aligerar tu peso, cargar con aquello que vas comprando o llevando de un lugar a otro sin tener que hacer tú el esfuerzo. Un Rolser también hace  esto, aligera tu carga para que te sientas mejor en tu trayecto.

Pero un Rolser te lleva un poco más lejos.

Para llevar un Rolser no tienes por qué ser una mujer de mediana edad, ama de casa las 24 horas del día, no tienes por qué seguir los cánones establecidos para las mujeres hace 50 años, ni siquiera tienes por qué ser una mujer. 

Llevar un Rolser significa ser tú mismo, ser persona, con ideas, con estilo, vanguardista o conservador, moderno o tradicional... significa ir más allá de lo que está estipulado. Rompiendo estereotipos, superando tus límites, haciendo lo que realmente te gusta, sin perder tu esencia.

Llevar un Rolser conlleva cuidarte, cuidar tu espalda, tu salud muscular y la salud de los tuyos, porque un Rolser también ayuda a conservar los alimentos en mejor estado durante su transporte desde el supermercado hasta casa (Rolser con bolsa térmica). 

Pero llevar un Rolser no es ayudarte solo en tu día a día, al utilizar un carro de la compra Rolser también ayudas a otras personas, al pequeño comercio, fomentando la economía local, por ejemplo. Ayudas a conservar el medio ambiente y cuidar del planeta con los carros de la compra ecológicos, elaborados con materias primas 100% recicladas.

Y todo esto sin perder ni una pizca de tu esencia, de tu estilo, de tu forma de ser.