¿Por qué utilizar un carro de la compra?

¿Por qué utilizar un carro de la compra si es solo para mujeres de mediana edad? 

La vergüenza, los prejuicios, los estereotipos son características que  asoman cuando se trata de darle nuevos usos a un producto que durante tanto tiempo ha ido unido a la realización de una sola cosa: hacer la compra; y ligado con un tipo muy particular de personas: mujeres casadas de mediana edad con hijos y amas de casa.

Romper con esto no es fácil. Son muchos años de creencias y experiencias vividas en torno a ello. Pero hoy en día está más que comprobado lo beneficioso de utilizar un carro para cualquier tarea que realices en tu vida diaria y en la que tengas que cargar con peso.

No solo evitará que te lesiones la espalda o los brazos, que siempre acaban marcados con las asas de las bolsas de plástico tan sobrecargadas y con el peligro de que estas se acaben rompiendo. 

Un carro te ayudará también a transportar con más facilidad tu carga de un lugar a otro, con comodidad, sin prisas, sin agobios, sin esfuerzos...

Un carro te ayudará a preservar el medio ambiente, al cambiar las ruedas del coche por las ruedas de un carro de la compra, aportas tu granito de arena a una menor contaminación y por lo tanto a una mejora de la salud del planeta.

También ayudas a fomentar la economía local, ya que al utilizar el carro de la compra no coges el coche para desplazarte a una gran superficie porque no lo necesitas, solo paseas, lo que es bueno también para tu salud.

Así que seas maestro, cocinero, médico, ama de casa, publicista, abogado o albañil, da igual, un carro de la compra siempre te facilita mucho más tu día a día.